» Perder la Dignidad es luchar por recuperar a un hombre, que ha sido infiel, y aún quizás lo está siendo, es rebajarte como mujer»
«Me dicen mis amigas que no debería permitirle que siga tratándome así».
«Me dice mi madre que no me rebaje y que no debo perder la dignidad.»
Si tu matrimonio ha entrado en crisis, si tu esposo te ha pedido tiempo, una separación para ver si te echa de menos, para necesitarte, si te ha dicho que te quiere pero no te ama, si hay una tercera persona en su vida pero sigues amándolo, posiblemente estés pasando el peor momento de tu vida. Pero en ningún momento quieres perder la dignidad, rebajarte.
Aturdida, desorientada ante una realidad que te ha golpeado de forma violenta, porque jamás te esperabas que tu esposo te dijera algo así, habrás recurrido a familiares, amigas, y habrás escuchado que no puedes perder la dignidad por ese hombre.
Confusa y perdida, porque él, justo él, con lo buena persona que es, te ha sido infiel, te encuentras en un mar de dudas, y no sabes qué hacer, ni qué está bien o mal en este momento. Y entras en una situación de incertidumbre ¿intento recuperar a mi esposo y mantener unida mi familia o no? ¿si lucho por el es igual a perder la dignidad como mujer?
Amigos, familiares, conocidos, ante una crisis de pareja y al verte sufrir, suelen dar sus consejos, sus opiniones, a veces incluso sin que se las hayas pedido. Quieren ayudarte. Te ven sufrir y su idea es aliviar tu dolor, pero en este momento, sus palabras no son lo que tú necesitas y te pueden confundir aún más. Te pueden aconsejar erróneamente. ¿Realmente se pierde la dignidad por intentar mantener tu familia unida? ¿Realmente es indigno creer que nuestro matrimonio puede superar una crisis donde hubo infidelidad? ¿Se pierde la dignidad cuando luchas por mantener unida la familia que vio nacer a tus hijos?
Amar no es perder la dignidad
Muchas de mis clientas tienen esta duda al iniciar el trabajo juntas. ¿Estoy haciendo mal? ¿Voy a perder mi dignidad, a rebajarme como mujer si intento superar esta crisis de pareja?
Todas las veces que lo conseguimos me reafirmo en que tratar de entender porqué estamos en crisis, aprender y corregir errores y mejorar la relación no es para nada indigno. No vas a perder la dignidad por hacer lo que te pide tu corazón. Se puede luchar por tu pareja, recuperar a tu esposo y ser mejores juntos TODO CON MUCHA DIGNIDAD.
Hace poco me escribía una clienta, que ha pasado por esta situación hace dos años, tras leer en internet la publicación de un psicólogo. Estaba desolada, había hecho grandes avances en perdonar y olvidar, en sanar emocionalmente, en recuperar la confianza en su esposo y la seguridad en ella misma, pero leer una de estas frases que a veces se comparten solo con la intención de «cazar» víctimas para convertirlas en clientes, le hizo hundirse, retroceder. Esa frase hablaba de que tras una infidelidad (usaba la palabra traición) para siempre se perdía la confianza. Usaba palabras como nunca, nada, todas, por siempre….. Frases que no ayudan a una mujer que está luchando por superar el dolor que produce un quiebre de la confianza. Frases que no son verdad.
Puedo decirte que mis clientas son un ejemplo real de que muchas de estas frases que se comparten desde el dolor de haber vivido una experiencia traumática, no son verdad. Ellas confían en sus esposos, han conseguido recuperar la confianza, la complicidad, construir un espacio de seguridad y respeto mutuo donde ambos se comprometen a cuidar del otro, a que la relación no sea igual, sino mucho mejor que antes, con comunicación efectiva, plena. Si, es cierto que durante y después de una infidelidad surge un estado de miedo, de inseguridad, de dolor y desconfianza. Pero para nada es verdad que la confianza sea algo imposible de recuperar.
No compartamos frases que tengan palabras como «siempre, nunca, todo, nada, jamás», etc. Cualquiera de estas frases genera limitaciones, limita la realidad que podemos llegar a creer posible. Si nos dicen «segundas partes nunca fueron buenas», ¿qué nos sugiere si lo pensamos en relación a una pareja que se está dando una oportunidad tras una crisis, una segunda oportunidad?
Frases como esa, por ejemplo, no son verdad si las extrapolamos al mundo del cine. Hay muchas películas cuya segunda parte fue igual o mejor que la primera. Me vienen a la mente algunas como Terminator o Volver al Futuro.
Lo que leemos en internet no es la verdad absoluta o un dogma.
Y si te lo tomas como tal, posiblemente sufras.
¿Quien lo escribe? Muchas veces tenemos que centrarnos en quién escribe, en cómo se sentía esa persona al escribir eso, en lugar de aceptar como válida una frase. Puede ser una persona que está dolida, lastima, por la infidelidad de su pareja, y que no ha podido superarlo. Una persona que se siente víctima de la situación y que no ha logrado recuperar su relación, puede ser alguien lleno de ira o de rencor. ¿Y si lo hubiera conseguido, habría escrito lo mismo? Seguramente no. Yo tengo claro que creo en que las segundas partes son mejores que las primeras porque ayudo a cientos de mujeres a lograrlo, pero sobretodo porque lo vivo cada día con mi esposo. De otra forma, si no fuera una realidad para mi, me sentiría un fraude.
Puedes seguir creyendo que si perdonas a tu pareja estás a punto de perder la dignidad. O puedes ponerte la mano en el corazón y estar convencida de que es muy digno luchar por tu familia, por tu pareja, por aprender a perdonar y olvidar, por seguir teniendo esta familia, con su padre y su madre juntos.
Pasar por esta crisis, por una infidelidad, es lo más duro que quizás te ocurra en tu vida. Y se sufre, duele. Puedes caer en el error de dejar que el victimismo te arrastre, puedes envenenar tu mente leyendo frases de personas envenenadas, prisioneras de lo que les tocó vivir. O puedes pasar de largo y buscar frases , ideas, pensamientos que te inspiren y te recuerden que VIVIR ES UN REGALO.
Sufrir es una elección personal, que es , muchas veces, el resultado de malas decisiones, como revolcarse en el fango de recuerdos malolientes y apestosos. El dolor es inevitable. Eres un ser humano y los seres humanos somos seres emocionales, que algunas veces sufren. Pero permanecer en el dolor, durante meses o incluso años, es una elección personal (equivocada).
Cualquiera puede sufrir toda la vida por una infidelidad. Eso es fácil. Basta con que cada día permitas que los cuervos-recuerdos lleguen a tu mente, los alimentes y les hagas un lugar, los dejes quedarse y atraerán , con sus ruidos, a otros cuervos, que te arruinarán el día, la semana, el año, la vida.
Pero no es obligatorio que permanezcas en el dolor. Como tampoco perder la dignidad es una consecuencia directa de apostar por entender qué ha sucedido en tu vida y la de tu esposo para que estén viviendo algo tan doloroso como una infidelidad y una posible ruptura. El futuro aún no está escrito y tú lo puedes cambiar. Porque todo cambia en nuestra vida y en la vida de los demás, cuando tomamos decisiones.