De pronto la vida te sacude, tu realidad cambia, de un día para el otro. Es injusto lo que te ha tocado vivir.
A veces incluso te cuesta perdonar, no crees que esa persona se merezca que le perdones.
Sientes dolor, la vida no ha sido justa. Internamente, te resistes a aceptar la situación. Crees que si perdonas, la otra persona pensará que no te dolió tanto.
Quieres pasar página, pero los recuerdos no dejan de llegar a tu mente. ¿Parece que vives en una pesadilla, despiertas y todo lo sucedido viene a tu mente sin que nada lo pueda evitar?
¿Aguantas, a duras penas, el dolor, pensando que el tiempo lo curará, pero nada cambia? ¿Parece que cada día que pasa todo duele aun más?
¿Solo podemos esperar, dejar que el tiempo pase?
No, por supuesto que puedes hacer mucho más.
No es el tiempo lo que cura las heridas. Sino el amor. Y ahora te toca amarte más que nunca. Darte la oportunidad de cerrar tus heridas, siendo tú quien se ocupe de ti. Eres la persona más importante de tu vida.
No solo es posible, es necesario. ¿Recuerdas esa frase que dice: No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista? Es el momento de hacer todo lo que está en tus manos, y quiero guiarte para que puedas lograrlo.