Estás hablando con tu pareja, y de pronto vas sintiendo que no te comprende. Según siguen hablando te sientes más y más incómoda con la situación. ¿Pero porqué te dice eso, si es mentira? ¿Cómo puede opinar así, si claramente eso no es verdad? ¿Por qué ve todo de forma tan terrible? No debería hablarme así…. La respuesta está en las distorsiones cognitivas. Pero…
¿Qué son los Distorsiones Cognitivas?
(y porqué te interesa a ti comprender esto)
A medida que escuchas, que hablas, que te estás relacionando con tu pareja, (o cualquier otra persona) tu mente, no solo está escuchando, también está evaluando, juzgando, comparando, procurando «entender» lo que sucede.
Y al intentar entender entran en juego las Distorsiones Cognitivas o Pensamientos Distorsionados ya que son la «manera» peculiar en la que interpretamos lo que nos sucede, la información que recibimos y muchas veces… no lo hacemos bien.
¿Alguna vez has pensado que «tus pensamientos» podían engañarte?
Particularmente hasta que no lo viví, yo no lo había pensado. Jamás se me había ocurrido pensar que la mente puede estar “distorsionada”. Yo veía la realidad desde mi punto de vista, desde mi mente, incluso desde mis propios sesgos, distorsionados. Le creía a mi mente. Pero mi esposo veía las cosas desde la suya, desde sus pensamientos, que en algunos puntos también estaban distorsionados. Antes de esto, solo podía decir, “no entiendo a mi esposo”. Y si yo no cambiaba el enfoque, ¡¡no había forma de entenderlo!!
Nuestra forma de pensar, a veces distorsionada, da lugar a conflictos, mal entendidos, peleas innecesarias. Y esto es algo que te ocurre a ti también, que le ocurre a tu pareja, a todas las mentes del planeta. Hagamos un breve resumen de los 10 tipos de Pensamientos distorsionados y su relación con los conflictos de pareja.
Pensamientos Distorsionados y Pareja
PERSONALIZACIÓN
Nuestra mente “razona” de manera incorrecta, sacando conclusiones en las que erróneamente, atribuye a otros la responsabilidad sobre algo, o se atribuye a uno mismo el origen de algo. Si uno siente que ha sido el responsable, surge la culpa, la ansiedad. Si considera culpable a otros, produce enojo, presión para que el otro se retracte o solucione lo que ha hecho mal.
Analicemos este punto con ejemplos concretos.
“YO no puedo acomodar mis horarios a los de mi pareja, por eso es infeliz”
“Mi esposo está serio, ¿qué le habré YO hecho para que se enoje conmigo?
Cuando personalizas, cuando “decides” que la situación ocurre como la estás “deduciendo”, tus actos son el reflejo de esa deducción. Tus acciones son consecuencia de ese pensamiento irracional. Y quizá luego de esa acción añades otro error. Buscas hablar con tu pareja para que te diga qué has hecho mal, o te enfadas, porque no has hecho nada para que tenga esa cara larga. Y puede que lo que le ocurra no tenga nada que ver contigo, sino con su trabajo, por ejemplo.
Crees que tu razonamiento y tus deducciones son ciertas, crees a tu mente. Si has personalizado, muchas veces te aseguro que no estarás en lo cierto. No somos el centro del universo del otro. Y su enfado, por ejemplo, puede tener cientos de razones y ninguna relacionada contigo. Si no sabes, o no entiendes, pregunta en lugar de confiar en una deducción que puede ser errónea.
«Cariño, ¿necesitas algo? ¿Puedo ayudarte?
POLARIZACIÓN
Este pensamiento irracional se hace presente cuando tienes la peculiaridad de ver la realidad como dos extremos opuestos. O es Negro o es blanco. Tu mente (o la de tu esposo) interpreta las situaciones, o juzga a las personas, sin término medio, de forma absoluta. Alguien es bueno y si no es bueno, entonces, es malo. Por lo general, podrás identificar un pensamiento distorsionado de este tipo por el uso de las palabras “todo”, “nada”, “nunca”, “siempre”, “nadie”, “todos”, «jamás».
Pongamos un ejemplo.
“¡¡Nunca te acuerdas de mi!! Solo piensas en ti. “
“Siempre me está riñendo”
¡Jamás haces nada bien!
Cuando evalúas una situación de forma absoluta, sufres en un grado máximo. No olvides que el lenguaje es generador de realidades. Si tu pareja utiliza mucho los términos que nos muestran que “polariza”, seguramente está sufriendo. Y puede que no haya sido capaz de explicarte la magnitud de su sufrimiento. Hay infinidad de grises, pero la forma de ayudarle a entender su distorsión cognitiva no es “negando” lo que dice. Es aprendiendo a comunicarse de una manera nueva. Ayudándole a ver que no es “siempre”, ni tampoco “nunca”. Hablando de momentos concretos. Dándole su parte de razón.
Comprender los pensamientos distorsionados del otro ayuda a comprender sus emociones. Este es uno de los puntos más importantes en el trabajo que hacemos para evitar un divorcio y mantener una familia unida. Poder comprenderse y mostrarle a la otra persona que hemos comprendido.
Si te comunicas diciendo, “Tú estás mal, eso no es así”, poco vas a poder resolver.
ETIQUETAJE
“¡Soy una persona tonta! ¿Cómo me dejo hacer algo así?”
“Es un desordenado, nunca pone las cosas en su lugar”
A menudo, este tipo de pensamiento distorsionado está estrechamente ligado a la sobregeneralización, a juzgar al otro de manera “global” por algunos hechos concretos. Por ejemplo, si alguien llega 3 de 10 veces tarde, calificarlo como impuntual y “colgarle” esa etiqueta.
Cuando te etiquetas a ti, te limitas e impides cambiar. Cuando etiquetas a los demás, juzgándoles, los tratas como si “siempre” fueran esa conducta que has etiquetado. Esto, a la larga, genera roces y conflictos en la pareja. Porque el otro ser niega a cargar esa etiqueta. Porque no es una etiqueta positiva, un halago, sino una crítica o juicio negativo sobre su comportamiento.
Mejorar una relación de pareja requiere aprendizaje, comprensión, requiere poder conocerse a uno mismo y comprender sus errores. Requiere comprender al otro y entender en qué momento su actitud es consecuencia de lo que yo hago o digo. Requiere mejorar la comunicación asertiva, para poder decir que NO sin miedo a perder el amor del otro, para no sentir que se nos obliga a hacer algo que no queremos hacer. Una relación mejor, se da entre dos personas que mejoran, que aprenden y crecen, que aumentan su inteligencia emocional y que aprenden a escuchar a su mente sin dar por hecho que todo lo que su mente dice o piensa será cierto.
NO creas todo lo que tu mente te dice, tal cual lo dice, porque muchas veces puedes tener un pensamiento distorsionado. NO te tomes al pie de la letra lo que te dice tu pareja, porque sus pensamientos pueden estar distorsionados.
NO te defiendas, intenta comprender.
Las distorsiones cognitivas restantes, que podemos analizar en relación a la pareja, y que dan lugar a conflictos son:
4.- SOBREGENERALIZACIÓN
5.- VISIÓN CATASTRÓFICA
6.- FALACIA DE CAMBIO
7.- RAZONAMIENTO EMOCIONAL
8.- LOS DEBERÍA/S
9.- RECOMPENSA DIVINA
10.- INFERENCIA ARBITRARIA
Si quieres comprender a tu pareja, es necesario también comprender la manera en que piensa, y la manera en que reacciona, analizando si su reacción es una consecuencia de la forma en que tú le hablas, le tratas o es consecuencia de las etiquetas que te ha puesto. Podemos hacerlo.
Aquí te dejo un enlace donde puedes leer más sobre las restantes distorsiones cognitivas.
En poco tiempo, profundizando en este y en otros aspectos claves para mejorar una relación, podrás ver cambios y muy buenos resultados. El amor solo no basta. Con el amor simplemente no alcanza para sostener una relación a largo plazo. Somos seres emocionales, complejos, que pasamos por crisis personales, de madurez, y si nuestro deseo es pasar todo esto juntos, es necesario aprender a hacerlo.
¨Si no le entiendes, te lo traduzco» Y si no te comprende, te ayudo a hablar su idioma.
Viki Morandeira