¿Qué te está diciendo una persona cuando te dice «Haz lo que quieras»?
¿Tu pareja te ha dicho «haz lo que quieras», lo has hecho y se ha enfadado? ¿Le has dicho a tu pareja, haz lo que quieras y te ha contestado con sarcasmo, con una actitud que te ha desconcertado?
En pareja el haz lo que quieras no tiene significado literal. Si nos ceñimos a lo que «literalmente» decimos con un «haz lo que quieras» es casi como «dar permiso» al otro, le decimos «puedes hacer lo que quieras» Pero detrás de esta expresión puede haber respeto y aceptación o frustración y rabia. ¿Entiendes qué significa cuando te lo dice tu pareja? ¿Desde qué emoción lo has dicho tú cuando has utilizado esa frase?
Haz lo que quieras
El tono con el que lo decimos es, en primer lugar, un indicativo de lo que hay detrás de esta frase. Si tu pareja te dice «haz lo que quieras» para entender lo que te está diciendo, es necesario analizar el tono, pero también su estado emocional. Estarás de acuerdo conmigo en que no es lo mismo un «haz lo que quieras» dicho con una sonrisa, con un tono amable, que uno expresado con cierta rabia y con un gesto serio o de frustración.
¿Qué hay detrás de un «haz lo que quieras»?
Puede haber frustración. Pero también una rendición.
Haz lo que quieras es la frase que una persona puede utilizar cuando no quiere discutir. Cuando opina diferente, pero no ha conseguido hacerse entender. Cuando se encuentra con que la otra parte insiste en defender la manera en que quiere hacer algo o lo que quiere elegir. Puede ser un «ganaste, me rindo».
Puede ser un «no me apetece seguir hablando de esto. No estoy de acuerdo, yo lo haría diferente, pero realmente no voy a seguir con el tema, porque no vas a hacerlo a mi manera, así que haz lo que quieras».
Puede ser la expresión resumida de un «ganaste«, me rendí, por mucho que te siga hablando no vas a entenderme, así que para mí aquí se terminó el tema, hazlo como tú quieras.
Frustración. No sentirse comprendido
Si tu o tú pareja utilizan muy a menudo esta frase, para y reflexiona. Puede ser sinónimo de muchas situaciones de frustración. Quizás no usas esas palabras, o tu pareja no las usa, pero puede «rendirse» cuando en algo opinan diferente y no ha querido seguir hablando porque no sabe como hacer para que dejes de defender tu postura y escuches la suya.
Algo muy diferente es decir, «Cariño, decide tú, por mi estará bien lo que tú decidas»
Ahí si le estas expresando a la otra persona que respetas su elección, que para ti estará bien lo que decida, lo que elija, que puede tomar la decisión y no habrá luego consecuencias.
En cambio, un «haz lo que quieras» se queda guardado en la memoria, duele, porque la mayoría de las veces no significa «respeto tu decisión y estaré bien». Sino algo muy diferente.
Puede significar
- me cansé de intentar que me entiendas
- ya no sé como hacerme entender, siento frustración, estoy entrando en un estado de nervios que no me gusta, me rindo
- diga lo que diga harás lo que tu quieras, así que no voy a gastar energías en exponer mi punto de vista
- ¿sabes qué? No peleo más, hazlo a tu manera y ya está. Y yo me voy con mi frustración a cuestas
- no estoy de acuerdo contigo, pero como no me gusta pelear, me retiro antes de empezar una discusión.
Para el otro todo esto es ajeno si no lo dices. Y muchas veces, desde el miedo al conflicto se utiliza un «haz lo que quieras» para zanjar un tema en el que se piensa que no habrá un entendimiento.
Te saldrá mal
Piensa en esta situación. Tu pareja te dice que hará algo, tú crees que así no debería hacerlo. Crees que por algún motivo si lo hace de esa manera saldrá mal. Pero tu pareja insiste, se encabezona y no te escucha. En ese momento le sueltas el «Haz lo que quieras» desde la frustración, pero también como un mensaje «de aviso». Es como decirle, Hazlo, pero ya verás que te saldrá mal. Ya verás que así no va a funcionar. Luego, cuando lo haya hecho, si le ha salido mal, es muy probable que le digas: Yo te lo dije.
Esto puede ocurrir también con un hijo, un amigo, un hermano, alguien que haya recurrido a ti para pedirte un consejo y luego no lo haya seguido. En este punto es necesario entender que si alguien quiere hacer algo y está convencido de hacerlo de una manera, es mejor dejar que lo haga.
Sin un «haz lo que quieras».
Sin un «te lo dije» despues.
La manera en que las personas aprendemos es muchas veces a través de la práctica y el error. Si no lo hace a su manera y si no falla, no sabrá que su manera de hacerlo no era la mejor. Respeta a los demás, simplemente dale permiso para equivocarse. Y sobre todo, luego no le hagas daño con un «Yo lo sabía» o un «Ya te lo dije». Eso jamás!!!
Habrá Consecuencias
Un «haz lo que quieras» para terminar una conversación en la que no estábamos de acuerdo en que la otra persona hiciera algo de determinada manera puede significar «Hazlo, tú hazlo, que luego ya verás lo que pasa». ¿Te suena haber utilizado esta frase en una situación así? Evítalo. No ganas nada, al contrario, la relación se va dañando si la otra persona vive amenazada o condicionada para hacer o no hacer según tú le des o no permiso.
Debes amar de tal manera que la persona que amas se sienta libre
Thich Nhat Hanh
Castigar a tu pareja porque no ha hecho lo que tú querías que hicieras es inmaduro y daña tu relación de pareja. No es una manera sana de amar. Si has utilizado esta frase, para evitar que tu pareja saliera ya puedes replantearte tu actitud. Que se quede contigo por miedo a las consecuencias No es sano para la relación, para tí, ni para tu pareja.
Ya me da igual
El peor significado de «haz lo que quieras» viene cuando alguien lo dice porque ya realmente no le importa lo que la otra persona haga. No lo dice porque respeta que haga las cosas a su manera, ni siquiera para advertirle de que algo le puede salir mal ni tampoco como advertencia de posibles consecuencias. Un «me da igual lo que hagas» es doloroso porque significa que tú le das igual. Y si eres tú quien lo utiliza, frena y analízalo. ¿Realmente te da igual o lo estás diciendo desde el dolor?
Si te duele, entonces, necesitas hacer algo. Entender algo. Cambiar algo. Estar en pareja al principio de la relación es maravilloso. Sin embargo, si tenemos una relación de larga duración es necesario asumir que no es una planta de plástico que seguirá siempre igual. Una relación de pareja es algo vivo, que requiere atención, amor, comprensión, cuidados, nutrirla, alimentarla y que funciona y mejore día a día es algo de lo que tú eres responsable. Un 50% te corresponde. No esperes a que tu pareja quiera ir a terapia de pareja para resolver los conflictos. Puedes trabajar en comprender tu parte, en mejorar tu 50% y las mejoras las notarás. Contáctame
Excelente.gracias