Unos días atrás, Laura, periodista de la Revista Telva, me contactaba en su investigación para publicar un artículo sobre como superar una infidelidad. Ojalá, le decía, fuera tan rápido de explicar y sobre todo, tan fácil de aplicar.
La infidelidad duele. De eso no hay duda. Y me consultaba. Pero… ¿Por qué duele tanto la infidelidad?
Puedes leer el artículo completo en este enlace.
El dolor es inevitable. Pero el sufrimiento es opcional. Tienes la opción de sanar tus heridas. Tienes derecho a ocuparte de ti, de tu dolor, de reparar tus heridas. Y es tu responsabilidad. Si crees que es algo que tiene que hacer tu pareja por ti, te equivocas. Tu estado emocional es RESPONSABILIDAD TUYA. Ponte en primer lugar. Por una vez puedes hacerlo, ser tu propia prioridad.
Te acompaño en el taller de Sanación Emocional. Puedes contactarme y charlamos sobre los pasos a seguir.
La infidelidad quiebra la confianza que tenías en tu pareja. Pero también te quiebra a ti.
Un daño colateral de los actos del otro es la pérdida de tu autoestima.
No te compares.
No alimentes tu dolor pensando en la tercera persona. Compararse es un gran error que estás cometiendo tú y es el origen de tu autoestima debilitada.
Infidelidad y autoestima
Antes de saber de su infidelidad, ¿cómo era tu autoestima? Sigues siendo la misma persona. Díselo a tu mente. Aún sigues siendo esa mujer que hasta hace poco se quería y se valoraba.
NO te quedes de brazos cruzados en tu dolor. Sanar es por ti. Recuperar tu autoestima es por ti. Incluso perdonar es algo que haces por ti.
Lamentablemente no todas las personas se responsabilizan de su recuperación. He trabajado con algunas mujeres que habían sufrido la infidelidad de su pareja veinte años atrás y aún sufrían. Si el golpe inicial fue duro, y no merecido. ¿Se merecían 20 años de dolor? No. Pero no hicieron lo necesario para salir de aquel sufrimiento hasta 20 años después.
Terrible. Pero afortunadamente eligieron sanar.
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